Mi experiencia en Kaay Barrios y Nder
Rocío Molina (Tarsis 351. Scouts de Andalucía)
No se me ocurre una forma mejor de empezar a contar cómo ha sido mi experiencia durante el proyecto Kaay Barrios de MAD África que con la siguiente pregunta:‘’¿Qué no he aprendido durante este tiempo?’’.
Comienzo con esa pregunta porque, si me paro a pensar en todo lo que he
aprendido, a la gente que he conocido, la deconstrucción tan bestial de la que puedo presumir, después de todas las formaciones, lxs amigxs que me llevo y que vienen, desde tan lejos, solo para compartir su experiencia con auténticxs desconocidxs, la posibilidad de unirme, gracias a Kaay barrios y a otro proyecto, llamado Nder, en el cual he podido conocer a mujeres maravillosas, luchadoras y fuertes y sobre todo a lo más preciado que tienen, sus niñxs. Por todo esto y muchas cosas, que seguro me dejo en el tintero, es por lo que me pregunto qué es todo lo que me falta, y la respuesta es muchas veces la misma: falta mucho por andar aún, pero después de este tiempo tienes un buen trecho recorrido.
Nunca imaginé que iba tener la oportunidad de formar parte de algo, para mi, tan grande, pero sigo día tras día agradecida a Cris, coordinadora de Kaay Barrios, por contactar con mi clan, a Isa, coordinadora de Nder, por contar conmigo como voluntaria para cuidar a lxs niñxs más bonitxs del mundo, a toda la gente que participó en las formaciones, tanto rovers, que compartían conmigo la experiencia Kaay, como a lxs profesionales, que, de forma altruista, nos explicaban todo aquello que podíamos hacer para cambiar al menos un poquito nuestra forma de ver el mundo y, sobre todo, a todas aquellas personas que estaban al pie del cañón conmigo haciendo entrevistas, ayudándome a aprender y siempre con una sonrisa en la cara a pesar de que estuvieran contándome como fue de duro el llegar a este país y el día a día en él. Por ejemplo Fatou, Thomas, Hawa, Amadou, Fata, y muchísimos más que me dejo en el tintero pero que, no por eso, no dejo de
acordarme de ellxs.
Mil gracias de corazón por ayudarme a ser un poquito mejor persona y, sobre todo, a enseñarme a transmitir todos estos conocimientos ya que ahí se encuentra el fin del proyecto, en enseñar y transmitir.
Hasta la próxima y con mucho cariño.